EL PAPEL DEL FARMACÉUTICO EN EL TRATAMIENTO DEL GLAUCOMA

El glaucoma es una enfermedad crónica degenerativa caracterizada por el daño progresivo del nervio óptico, que conduce a la pérdida irreversible de la visión y es la segunda causa de ceguera en el mundo.

Los pacientes geriátricos muchas veces no se adhieren adecuadamente a las terapias del glaucoma, debido a la dificultad de aplicar colirios y medicamentos tópicos por un lado, y la facilidad con la que se olvidan de la administración por otro. En estos casos, los farmacéuticos pueden desempeñar un papel muy importante en la prevención y la mejora de los resultados clínicos de la terapia en los pacientes, ya sea actuando como cuidadores o brindando asistencia e información.

El problema de la adherencia terapéutica en el glaucoma

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la adherencia como “la medida en que el comportamiento de una persona al tomar medicamentos, seguir una dieta y/o cambiar el estilo de vida se corresponde con las recomendaciones acordadas con un profesional de la salud”. La mala adherencia a los tratamientos es un problema mundial que compromete la efectividad de las terapias, la calidad de vida y la economía de la salud.

La adherencia terapéutica en el caso de los medicamentos para el glaucoma se asocia con una serie de factores, que se han clasificado en cuatro grupos: adherencia relacionada con el paciente, adherencia relacionada con el medicamento, adherencia relacionada con el proveedor y factores situacionales/ambientales.

En el manejo del glaucoma, la mala adherencia al tratamiento es uno de los principales problemas, debido a los resultados negativos y mayores costes del servicio de atención oftalmológica. Además, si se proporciona un tratamiento apropiado, efectivo y exitoso, la ceguera secundaria al glaucoma es prevenible. El objetivo principal de la terapia del glaucoma es, de hecho, la prevención de la pérdida progresiva de la visión mediante la reducción de la presión intraocular. Esto se puede lograr mediante la administración de fármacos oftálmicos, tratamiento con láser, cirugía o una combinación de estas modalidades.

Los medicamentos tópicos son la primera línea de tratamiento para reducir la presión intraocular. Por lo tanto, la adherencia a largo plazo a estos medicamentos es crucial para limitar la progresión de la enfermedad. Se ha demostrado que los pacientes con mala adherencia a los medicamentos tópicos para el glaucoma tienen peores resultados, con una mayor tasa de pérdida de la visión y mayores costes de atención médica.

El papel del farmacéutico.

Debido a que los farmacéuticos tienen contacto directo y regular con los pacientes y tienen acceso a los datos de dispensación de medicamentos, pueden desempeñar un papel vital en el asesoramiento a los pacientes y en la mejora de la adherencia terapéutica. El compromiso del farmacéutico, en colaboración con los prescriptores, debe ser, por tanto, el de vigilar la adherencia terapéutica de los pacientes con glaucoma y apoyarles mediante la educación en la correcta administración de los medicamentos.

En un estudio reciente se analizó el cambio en la adherencia al tratamiento de pacientes con glaucoma siguiendo la intervención/guía del farmacéutico. En esta investigación, después de 6 meses, se encontró un cambio significativo en el grupo de pacientes seguidos por farmacéuticos, que pasaron de baja a alta adherencia. Además, el número de pacientes cuya presión intraocular estaba en el rango seguro aumentó significativamente entre los que fueron seguidos por farmacéuticos. Finalmente, las sesiones de seguimiento mejoraron significativamente el conocimiento y la concienciación de los pacientes sobre su patología.

Por lo tanto, los resultados de este estudio demostraron que la asistencia educativa y el apoyo en la atención del farmacéutico es un método eficaz para mejorar la adherencia a los medicamentos para el glaucoma, especialmente en pacientes geriátricos, que han mostrado una mejor adherencia y una consecuente mejoría marcada en el control de la presión intraocular.

 

Dr. Carmelo Chines
Director responsable

Bibliografía

1) Ayesha Aleem et al., Impacto de las intervenciones dirigidas por farmacéuticos en la mejora de la adherencia a los medicamentos para el glaucoma en la población geriátrica, Eur J Hosp Pharm. 7 de julio de 2021; ejhpharm-2021-002788. doi: 10.1136 / ejhpharm-2021-002788. 

2) Abel Sinshaw Assem et al., Nivel de adherencia al fármaco para el glaucoma y sus factores asociados entre pacientes adultos con glaucoma que asisten al Hospital especializado Felege Hiwot, ciudad de Bahir Dar, noroeste de Etiopía, Optometría clínica 2020: 12 189–197

3) Michael Feehan et al., Adherence to Glaucoma Medications Over 12 Months in Two US Community Pharmacy Chains, J. Clin. Med. 2016, 5, 79; doi: 10.3390 / jcm5090079

Puede interesarle también


El papel de la inflamación en el glaucoma

La aparición del glaucoma está relacionada con varios factores de riesgo, como la edad avanzada, el aumento de la presión intraocular (PIO) y los antecedentes genéticos. El estrés oxidativo, la disfunción mitocondrial y la senescencia celular tienden a aumentar en la retina envejecida y se consideran uno de los principales factores que incrementan el riesgo de glaucoma. Cuando la retina envejece, el estrés oxidativo y la peroxidación lipídica se consideran las principales causas de estrés tisular, lo que conduce a la activación de la parainflamación local de diversos grados.

Leer

Glaucoma congénito

El glaucoma congénito es un conjunto de enfermedades caracterizadas por la existencia de anomalías que provocan un aumento de la presión interna del ojo, dañando al nervio óptico, y que se da desde el nacimiento o en los primeros meses de vida del niño. Si se da en la primera infancia (desde los primeros meses hasta los tres años), se le denomina glaucoma infantil y, si se manifiesta a partir de los 3 años de edad hasta la adolescencia, se le denomina glaucoma juvenil, que es la forma menos frecuente.

Leer