El glaucoma es la mayor causa de ceguera irreversible del mundo. Ocurre con mayor frecuencia en personas mayores y se ha estimado que, en todo el mundo, más de 60 millones de personas sufren de neuropatía óptica debido al glaucoma. Es una patología caracterizada por la pérdida adquirida de células ganglionares retinianas y axones dentro del nervio óptico con pérdida progresiva de la visión.
Existen estudios científicos que relacionan la influencia de la nutrición y los niveles de determinados nutrientes en sangre con el riesgo de padecer glaucoma o el progreso de la enfermedad. A continuación, procederemos a enumerar algunos de estos nutrientes.
Vitaminas y minerales
En estos estudios se observaron niveles bajos de vitaminas C y E en pacientes de glaucoma. La vitamina C podemos encontrarla en alta cantidad en naranjas y otros frutos cítricos, tomates, coliflor, repollo, espinacas, varios tubérculos como la batata o el boniato y pimientos, entre otros, mientras que la vitamina E está presente en el aceite de girasol y de soja, germen de trigo, avellanas, almendras, coco, soja germinada, cacahuetes y nueces.
Además, se vio que personas con un consumo alto de retinol (vitamina A), presente en la carne (fundamentalmente hígado y riñones), mantequilla, leche, queso, huevos o nata y de la tiamina (vitamina B1), presente en lomo, jamón, pistachos, avellanas, judías blancas, maíz, ciruelas o higos secos, tenían 2 veces menos riesgo de padecer OAG o glaucoma de ángulo abierto que las personas que tomaban una cantidad menor de estos nutrientes.
Adicionalmente, vieron que aquellas personas que consumían magnesio en altas cantidades tenían 3 veces menos riesgo de padecer esta enfermedad, y este se encuentra disponible en almendras, cacahuetes, garbanzos, guisantes, chocolate, grano integral, lentejas o acelgas.
Ácidos grasos
Otro estudio mostró un aumento del riesgo de glaucoma de ángulo abierto en aquellas personas que tenían un ratio omega-6 / omega-3 alto. Estos ácidos grasos están en mayor cantidad en aceites, pescado azul, marisco, aguacate, semillas, verduras de hoja verde, avena, quinoa, embutidos, huevos y margarinas.
Otras sustancias
El café es rico en cafeína, un compuesto activo que tiene numerosos efectos en nuestro cuerpo. Respecto a esto, se observó una elevación en la presión intraocular media de los pacientes que tomaban café de manera regular, debido a que la cafeína estimula la producción del humor acuoso.
Por último, en cuanto al extracto de Ginkgo biloba, un árbol que tiene numerosas propiedades farmacológicas y que también se usa en el tratamiento del glaucoma, hay evidencia que sugiere que aumenta el flujo sanguíneo ocular, mejora la supervivencia de las células ganglionares de la retina y protege frente al estrés oxidativo.
De todo esto podemos concluir que cuidar nuestra dieta es muy beneficioso de cara a prevenir o frenar la progresión de esta enfermedad que afecta a tantas personas.
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